
Hola Cociner@s. Hoy no cocinaremos, sino aprenderemos como depurar nuestro organismo para quien (como yo, ejem, ejem) se haya dado atracones últimamente. En primer lugar quiero recordarles que las dietas depurativas son dietas a corto plazo y no se las recomiendo a los niños, embarazadas o si están amamantando.
Hoy aporto una, pero en los próximos días traeré varias opciones, y quien lo desee elija o adapte a su organismo la que considere más adecuada: escucharnos a nosotros mismos es la mejor guía.
Las DIETAS DEPURATIVAS tienen la función limpiar el organismo y establecer un equilibrio corporal y pueden constituir una alternativa más fácil de llevar que los ayunos estrictos o un paso previo de iniciación al ayuno que nos permitirá en otro momento acceder más fácilmente al ayuno total
Existen muchas dietas depurativas, pero entre todas ellas merece la pena mencionar las dietas de verduras y frutas .Entre todas ellas destacan las siguientes:
- Dieta de la fruta:
Puede hablarse de una dieta realizada exclusivamente con fruta. Se trata de una dieta más estricta en la que la un tipo de fruta aparece como única comida .
-Dieta mixta de frutas y verduras en la que se combina la fruta con otras verduras.
DIETA DE LA FRUTA COMO ALIMENTO EXCLUSIVOVentajas de la dieta de frutas
La dieta de la fruta es un tipo de cura natural consistente en comer solamente fruta durante algunos días. Este tipo de dietas se utiliza fundamentalmente en primavera aunque puede llevarse a cabo en cualquier época del año. Hay que hacer constar que es diferente esta dieta del hecho de comer fruta un día a la semana o de comer solamente fruta en alguna comida del día como puede ser el desayuno o la cena. Se trata de utilizar solamente fruta durante algunos días.
La fruta tiene la ventaja de que contiene mucha agua, muchas vitaminas y muchos minerales. La cantidad de agua de las frutas realiza una función diurética, por lo que aumenta la micción y con ella arrastra las toxinas de nuestro organismo. La mayoría de los órganos de la digestión ( hígado, riñones, vesícula, etc) resultan fortalecidos y purificados con estas curas. La fruta es muy rica en fibra por lo que, al aumenta la expulsión de excrementos, conseguirá eliminar del intestino todas las impurezas.
- Tipo de fruta: Se debe escoger fruta fresca, de buena calidad, preferentemente de cultivos biológicos. En este caso, bastará solo con lavarla y se comerá con la piel dado que la mayoría de las vitaminas y minerales se encuentran en ella. Es importante escoger la fruta correspondiente a la estación del momento y rechazar aquella fruta que ha estado mucho tiempo en la cámaras frigoríficas.
- Como comer la fruta: Se comerá la fruta cruda cruda. Aunque la fruta cocida puede resultar muy sabrosa, pierde muchas propiedades en la cocción.
- Evitar la fruta contaminada: Si no estamos seguros que la fruta procede de cultivos biológicos es mejor pelarla. Nunca se debe comer la piel de los cítricos dado que reciben muchos tratamientos fitosanitarios.
- Cantidad de fruta recomendada: La cantidad de fruta diaria se establece entre 1 y 2,5 kilos diarios como máximo.
- Duración de la dieta: La duración habitual de este tipo de curas de frutas es de unos 2- 3 días aunque, en condiciones de mucho control médico, puede alargarse hasta 12 días.
- ¿Qué no se debe comer?: Ciertos productos tóxicos o excitantes como el café, el tabaco, el alcohol, el chocolate deben evitarse. Igualmente deben excluirse las carnes, las pastas, caramelo o bebidas con azúcar.
- ¿Qué puede tomarse?: Aparte de las frutas, se debe beber agua en abundancia y, aún mejor, pueden tomarse tisanas depurativas o diuréticas con plantas que estimulen la función renal y ayuden a eliminar líquidos, por ejemplo el diente de león, la ortiga, la cola de caballo, etc. ( traeremos más información sobre plantas diuréticas y como utilizarlas) Para acompañar a las frutas pueden también tomarse zumos que harán mas fácil la ingestión de estos alimentos.
Además de utilizar tisanas o zumos , resulta muy conveniente utilizar el jugo fresco de las hojas de algunas de estas plantas diuréticas, como los berros, el llantén o el diente de león o repartir el zumo de un par de limones exprimidos diluido en agua a lo largo de todo el día.